Agencias/Ciudad de México.- China pidió este lunes a las autoridades mexicanas que “intensifiquen” sus esfuerzos en la investigación después de que fueron hallados en la costa mexicana ocho cuerpos sin vida de migrantes de originarios de esa nación asiática cuya embarcación naufragó.
El bote, operado por un ciudadano mexicano, zozobró después de partir el pasado 28 de marzo de Tapachula, en el estado de Chiapas (sur), siguiendo una ruta frecuentemente utilizada por migrantes que buscan llegar a Estados Unidos.
El portavoz de la Cancillería china, Wang Wenbin, declaró este lunes en una rueda de prensa que Pekín está “prestando mucha atención a este incidente”.
Wang indicó que diplomáticos chinos están colaborando con las autoridades mexicanas para “verificar más información sobre las víctimas”, al tiempo que pedía a las autoridades locales que “intensifiquen sus esfuerzos” en las pesquisas.
Un equipo enviado por la embajada de China en México se ha desplazado al lugar de los hechos, indicó el vocero, que añadió que su país está “brindando asistencia a los ciudadanos chinos supervivientes”.
Según un superviviente, la embarcación volcó el 29 de marzo con todos los tripulantes, que quedaron a la deriva en el mar.
Los cuerpos sin vida de las víctimas emergieron en el paraje denominado Playa Vicente, perteneciente a San Francisco del Mar, una playa de mar abierto en el istmo de Tehuantepec.
El pasado 30 de marzo, Fiscalía General de Oaxaca (FGE) confirmó que ocho migrantes originarios de China murieron al naufragar una lancha que los transportaba de forma irregular sobre las costas del Istmo de Tehuantepec.
En un comunicado la FGE detalló que los cuerpos de las víctimas fatales correspondían a 7 mujeres y 1 hombre.
Agregó que, según la declaración del único sobreviviente, identificado como Juanghuaeg Zhongjin, las víctimas viajaban a bordo de una embarcación guiada por un hombre mexicano que salió de Tapachula, Chiapas, el pasado jueves 28 de marzo.
Un día después, la embarcación naufragó quedando a la deriva en altamar donde murieron ahogados ocho tripulantes y uno de ellos sobrevivió.
Entre las víctimas, dijo el superviviente, viajaba su esposa.
Viajar hacinados en todo tipo de transportes y rutas son de las formas más peligrosas que usan los migrantes para cruzar clandestinamente México rumbo a Estados Unidos, por lo que pagan miles de dólares a los traficantes.
Desde octubre de 2018 y a pesar del endurecimiento de la vigilancia en la frontera sur de México, miles de migrantes de Centro y Sudamérica, el Caribe y de países de África y China entran en el territorio mexicano con el objetivo de llegar a Estados Unidos.
Los traficantes de personas buscan rutas para los extranjeros y en ocasiones se estacionan en los estados del sur del país como Chiapas, Tabasco, Veracruz y Oaxaca, además de los del norte, que hacen frontera con Estados Unidos, una de las últimas paradas en su travesía hacia EUA.
