Agencias/Ciudad de México.- Los contagios de coronavirus se multiplican en toda Europa. Alemania, Francia e Italia, los tres países más poblados de la Unión Europea, marcan máximos de infectados en 24 horas desde el inicio de la pandemia.
Este sábado, Alemania volvió a batir su récord, por tercer día consecutivo, con 7.830 nuevos infectados, casi 500 más que el viernes, según el Instituto Robert Koch.
La canciller alemana, Angela Merkel, pidió esta semana a los alemanes que permanezcan en sus casas en la medida de lo posible y que limiten los desplazamientos y reuniones a los que sean imprescindibles.
Con todo, el ministro de Asuntos Exteriores alemán, Heiko Maas, expresó este sábado la disposición de Alemania a volver a recibir pacientes de coronavirus de otros países de la UE ante el creciente número de casos.
“Si nuestros vecinos experimentan dificultades en la atención a pacientes con coronavirus, lógicamente ofreceremos de forma rápida nuestra asistencia en la medida que nuestras capacidades lo permitan”, afirmó en declaraciones a la red editorial germana RND.
“En el ámbito europeo podemos coordinarlo ahora mucho mejor que en la primavera a través del nuevo sistema de alerta temprana. Y en esta solidaridad confío si el otoño se vuelve difícil”, ha indicado Maas.
Con 32.427 contagios en las últimas 24 horas, en todo el país, Francia ha dispuesto que el toque de queda en París y ocho grandes áreas metropolitanas será más estricto este sábado, desde las 21:00 hora local, después de la flexibilidad de ciudadanos y policías de la primera jornada, que comenzó a medianoche.
Aunque el gobierno y muchos médicos argumentan que es necesario actuar ya porque los hospitales pueden llegar de nuevo a colapsar, muchos propietarios de restaurantes están molestos por el golpe que sufrirán sus negocios.
“Cerrar a las 21:00 no tendrá ningún efecto (sobre el virus). No lo están atacando de la manera correcta”, dijo Gerard, gerente de un restaurante de Toulouse, en el sur del país.
Italia, con 10.925, también acaba de superar sus anteriores tope de casos en un solo día. El primer ministro italiano, Giuseppe Conte, anunciará este domingo nuevas restricciones para intentar frenar el aumento de casos.
Protección Civil italiana informó las nuevas cifras en el que supone el cuarto día consecutivo de récord diario de contagios.
El boletín incluye además 47 nuevos decesos para sumar 36.474 muertes y 402.536 casos confirmados desde el inicio de la pandemia.
El anterior récord data del 21 de marzo, en plena primera ola del coronviarus, pero entonces la situación era muy distinta, ya que se hacían muchas menos pruebas al día y el sistema sanitario está mucho menos saturado.
Europa concentra ya un tercio de los contagios diarios en el mundo, que hoy ha superado por primera vez los 400.000 afectados en 24 horas, y países como República Checa, Austria, Polonia, Hungría, Bulgaria, Ucrania, Eslovenia y Bosnia-Herzegovina también han alcanzado cifras récord.
En España, el Gobierno vasco anuncióeste sábado nuevas medidas para intentar frenar la propagación del virus. Las reuniones sociales quedaron restringidas a un máximo de seis personas, se decreta el cierre de la hostelería a medianoche y de parques infantiles a las once de la noche.
La hostelería tendrá restricciones del aforo al 50% en interiores, una limitación que se aplicará también en las ceremonias religiosas o en el uso de ascensores.
El Gobierno de Cantabria recomendó este sábado el “autoconfinamiento voluntario” y que se limite “al máximo la actividad social y la movilidad”.
En el Reino Unido el país más enlutado de Europa con 43.400 muertos, la mitad de la población de Inglaterra, es decir, unos 28 millones de personas, viven desde este sábado regidos por nuevas restricciones.
Las reuniones de familia y amigos que no viven bajo el mismo techo están prohibidas en Londres y en otras zonas de Inglaterra.
En la región de Lancashire (noroeste), que junto con Liverpool son las dos zonas en alerta “muy alta”, las restricciones son aún mas fuertes.
La urgencia de la situación presiona cada vez más al primer ministro británico, Boris Johnson, a quien se le ha pedido que imponga ya un sistema de contención conocido como “cortocircuito”, en el que la oposición laborista y expertos médicos piden un cierre total puntual para atajar de raíz los contagios.
Esta medida es parecida a la cuarentena de la primera ola y ha sido propuesta, sobre todo, por el estado de los hospitales británicos, muchos de los cuales vuelven a estar al límite de sus capacidades.
