Agencias / Ciudad de México.- La manufactura de clase mundial ha sido un distintivo de México por su capacidad para producir calidad en el sector aeroespacial y actualmente es el principal abastecedor de Estados Unidos en ese rubro.
“Una manufactura de clase mundial se puede vender en cualquier parte del mundo y es competitiva, tanto en costos como en calidad”, refirió, en entrevista, Luis Lizcano, director general de la Federación Mexicana de la Industria Aeroespacial (Femia).
Por ello, 99 por ciento de la producción nacional del sector aeroespacial es de exportación, destacó el directivo.
Al cierre de 2018, las exportaciones del sector fueron por 8 mil 600 millones de dólares, es decir, 13 por ciento más que en 2017, informó Lizcano.
Para 2018, México desbancó a Brasil como sexto proveedor de manufactura aeroespacial de Estados Unidos, sitio que el país sudamericano mantenía desde 2015, al exportar 3 mil 70 millones de dólares, según datos del Departamento de Comercio de la nación gobernada por Donald Trump.
Dichas ventas representaron un crecimiento de 19.3 por ciento en 2018, respecto a 2017, en los envíos al vecino del norte.
Mencionó que los estados más representativos en este sector son Baja California, Sonora, Chihuahua, Nuevo León y Querétaro.
Entre las empresas del sector aeroespacial nacional se encuentran Safran, Bombardier y Airbus.
En México, 80 por ciento de la industria aeroespacial se compone de áreas dedicadas a la manufactura, por ejemplo, el ensamble o procesos especiales como tratamientos térmicos, para los cuales se requiere desarrollar en la fabricaciones de los aviones, pues en su uso tienen cambios constantes de temperatura y altura, detalló.
El resto se divide en mantenimiento, ingeniería y diseño, agregó.
Sin embargo, reconoció que hace falta un mayor desarrollo dentro del País en el área de ingeniería y diseño propio, así como la preparación de los profesionales para responder a las demanda de la industria.
“Y hace falta apuntalar las habilidades para que estos ingenieros puedan tener el conocimiento para manejar estas cosas porque no es cosa común”, afirmó.
Consideró que se requiere más talento humano preparado de acuerdo con las necesidades que tiene la industria, porque actualmente las compañías incurren en un costo importante para capacitar a los ingenieros.
Y se necesita incrementar la proveeduría nacional.
“Ahorita uno de los retos que tenemos para seguir desarrollando, es poder consolidar la cadena de proveeduría nacional. Entre más integrada esté en México, entonces más integración vamos a tener también dentro del producto final”, comentó.
