Agencias/Ciudad de México.- El Gobierno federal mantiene bajo investigación a funcionarios que suscribieron tres contratos sin licitación con la empresa ‘Kouro’ propiedad de los hijos de Jesús Murillo Karam ex procurador General de la República (FGR) entre el 23 y 25 de junio de 2020.
Los contratos han sido suscritos por funcionarios que formaron parte del equipo de Murillo Karam, siendo este procurador de la extinta PGR ( hoy Fiscalía), en el sexenio de Enrique Peña Nieto, de acuerdo con un cotejo de documentos realizado por Mexicanos contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI).
La investigación ha sido abierta contra funcionarios de la Fiscalía General de la República (FGR) en Jalisco, Baja California y Sonora, que firmaron contratos con la empresa Kouro, de los hijos de Jesús Murillo Karam, que aparecían en la nómina bajo su cargo en la extinta PGR.
Las obras, que en total sumaron casi 7 millones de pesos, fueron entregadas de forma directa, sin licitación, entre el 23 y 25 de junio de 2020.
Victorino Porcayo Domínguez, delegado de la FGR en Baja California, firmó un contrato con Kouro Desarrollos y Concretos San Cayetano por 2 millones 393 mil 721 pesos para el mantenimiento de inmuebles de la dependencia, de acuerdo con el documento signado por el titular, con fecha del 24 de junio de 2020.
Antes de tener este cargo, fue subprocurador de justicia -de 2014 a 2015- en la delegación de la entonces PGR en Michoacán.
También participó en esta contratación el responsable de adjudicaciones y ejecución de trabajos de la dependencia, Enrique Piña Tafoya. Él trabajó en la PGR desde 2005 y durante el periodo de Murillo Karam fue subcoordinador de Servicios Especializados.
Un día antes, el 23 de junio, la delegación en Jalisco de la FGR también contrató a Kouro por 2 millones 390 mil 689 pesos, para obras de mantenimiento.
Mauricio González Pedrozo, el encargado del Despacho de la Subdelegación Administrativa, fue uno de los funcionarios que hizo la contratación.
Desde 2013 y hasta el día de hoy, él se encarga de las licitaciones y adjudicaciones de contratos en la FGR, de acuerdo con su declaración patrimonial pública reportada en el sitio Declaranet.
En Sonora, Angélica Yecenia Ballesteros, la actual subdelegada administrativa en la FGR en el estado, tomó ese cargo cuando Murillo estaba al mando de la PGR, en 2014.
Ella fue quien firmó un contrato por 2 millones 151 mil 887 pesos con Kouro el 25 de junio de 2020.
El trabajo que hace Ballesteros desde su nombramiento consiste en revisar el manejo de los recursos humanos, financieros y materiales, primero en la PGR y ahora en la Fiscalía.
De acuerdo con un cotejo de documentos realizado por Mexicanos contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI), la Fiscalía General de la República asignó los contratos referidos cuando ya tenía en marcha una investigación contra el ex Procurador por la adquisición irregular de Pegasus, desarrollado por NSO Group, de Israel, el cual fue utilizado por el Gobierno de Enrique Peña para el espionaje telefónico de periodistas y activistas de derechos humanos.
MCCI reveló desde 2017 que la PGR de Murillo Karam había pagado 32 millones de dólares por Pegasus a Grupo Tech Bull, una empresa aparentemente fantasma, cuyo supuesto dueño residía en la zona de las cañadas de la Alcaldía Álvaro Obregón.
El miércoles, la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) confirmó que Tech Bull es una empresa con características de empresa “fachada”, y reveló que desde 2019 había bloqueado sus operaciones y formalizado una denuncia ante la FGR.
Kouro Desarrollos tiene como socios a Sandra Georgette y Jesús Murillo Ortega, hijos del ex Procurador, mientras que en Concretos San Cayetano aparecen como accionistas Carlos Eduardo Luna Mora y Miguel Ángel Tello Ludlow.
Además de participar de forma conjunta para ejecutar obras en la FGR, Luna Mora, Tello Ludlow y el hijo de Murillo Karam comparten acciones en cinco empresas del giro restaurantero y en dos inmobiliarias, de acuerdo con datos de registros públicos consultados por MCCI.
En junio de 2016, MCCI reveló que Kouro, junto con otras dos constructoras de hijos, sobrinos y parientes políticos de Murillo Karam, ganaron contratos de obra por 4 mil 625 millones de pesos (más de 300 millones de dólares), justo durante los tres años en que ocupó uno de los puestos más importantes en el gabinete presidencial.
Las constructoras ligadas a los Murillo multiplicaron, en ese periodo, 714 por ciento sus contratos.