Dice Ricardo Anaya: ¿Sabes? Me duele mucho la cabeza. ¿A ver? Tienes un chipote igual que yo. ¿Y tendrá Remedio? Es cáncer maligno. Creo que no.
El silencio.
Por David Vargas Araujo/Ciudad de México.- Durante más de 36 años, Aguilar Camín y Enrique Krauze, han vivido de los gobiernos neoliberales. Su trayectoria “intelectual” se las creo el neoliberalismo. Fueron y son comentócratas sin que pasen de eso. No llegan a las universidades. Y hasta donde yo sé jamás leímos un Libro de estos dos hombres. Con Salinas. Zedillo. Fox.
Calderón y Peña Nieto. Se llenaron sus escritorios y cuartos de estudios de miles de millones de pesos. Hoy son inmensamente ricos estos dos “intelectuales. Por ello su enojo y coraje en contra de AMLO. Por ello su molestia en contra de la lucha contra la corrupción que ha implementado la cuarta transformación.
Después de muchos años de estar robando junto a los expresidentes, se fueron enfermando de corrupción y de impunidad. Esa enfermedad que se desarrolló durante años y hoy descubrieron que es un tumor maligno. Los dos fueron al hospital Los Ángeles del Pedregal, y el diagnóstico no falló. Tumor cancerígeno y maligno. No lo creían. No lloraron. Solo decían, que estaba mal los aparatos infrarrojos y de rayos X del hospital. Se fueron para comprobar al Instituto Nacional de Cancerología en la Zona de Hospitales.
Entraron y hablaron con sus viejos amigos doctores, que de inmediato les hicieron la valoración médica. De nueva cuenta salió el diagnóstico, tumor cancerígeno maligno. Ahora si estaban tristes. Solo los dos. Y empezar a recibir las quimioterapias y la plaquetas, para tener un poco más de vida. Les pidieron donadores de sangre. Pero ellos dijeron no nos preocupemos ahí tenemos los “650 abajo firmantes”.
Los estrategas de oposición de la derecha siguen con su enfermedad, y siguen aun así, haciendo la estrategia y táctica de Sun Tzu, pero todo lo hacen al revés. La filosofía no se les da, porque no son filósofos, lo militar no les sale porque no tienen carrera militar. Pues ni siquiera hicieron su servicio militar.
Krauze-Camín, se reúnen en la casa de Lomas de Chapultepec, desde ahí planean, hacen sus reuniones vía zoom. Y desde el viernes empezaron a redactar su manifiesto “esto tiene que parar”, que más bien es por su enfermedad, porque el tumor sigue avanzado en sus cabezas y ellos quieren que ya se pare y no se les invada el cuerpo de cáncer. El sábado decidieron tomar el palacio nacional y derrocar a AMLO, mediante las casas vacías de campañas de FRENA encabezados por Gilberto Lozano. Hoy mandan a Ricardo Anaya, porque se necesita un golpeador. Se necesita levantar y enderezar el plantón. Hoy ya se fue la poca gente que pudieron acarrear, y Lozano se fue del plantón por enfermedad.
El plan de estos “intelectuales”, no les ha salido, todo ha salido mal. Desde la creación de la BOA. FRENA y ahora el TUMOR, que les salió peor, porque ya es una enfermedad que padecen. El cáncer de la corrupción los tiene ya sin oxígeno, piden a gritos el regreso del neoliberalismo, piden a gritos la robadera, piden a gritos la corrupción. Piden a gritos un refuerzo. Y ya llegó Ricardo Anaya. Ya lo prepararon para ahora sí generar la” insurrección popular” Llamaron a otro enfermo que también tiene el tumor. Ricardo Anaya viene a enderezar el desastre de la derecha que no da ni una. Anaya será otro cartucho mojado. Igual que los “intelectuales”. Anaya el señor de los moches de PEMEX. Ya regresó, esperemos que regresé lo que se robó.
El tumor de Krauze-Camín y Ricardo Anaya ya se desbordó, y el cerebro de ellos está siendo carcomido por el cáncer. Así que ya el cerebro ya no genera, dopamina ni serotonina y las neuronas se están muriendo de 650 en 650. El pensamiento de estos que ha pasado desapercibido en el ámbito académico, científico y cultural, se está saliendo hasta por el sudor de sus axilas, ante el nerviosismo de que todo lo que hacen, pues nomás se queda en propuesta de un solo día.
Así que seguiremos escuchando lluvia de ideas que sólo caerán en las casas de campañas vacías. Seguiremos viendo como la llovizna de ideas caerán sobre el silencio de Av. Juárez. Caerá el chipi chipi de ideas en los plantones, que son esos grandes árboles de la alameda central. Anaya se convertirá en un chubasco que solo mojara su pequeña sombra. Anaya y su canallada acompañando a Krauze-Camín.
