Agencias/Foto-FES Cuautitlán/Ciudad de México.- Un grupo de investigadores de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) descubrió una nueva especie de árbol mexicano en el bosque templado de la Sierra Madre Occidental, en el estado de Sinaloa, en los límites con Durango.
Los investigadores ubicaron la especie Coutaportla lorenceana, endémica de México y conocida únicamente en el bosque de encino y pino ‘El Palmito’, en laderas rocosas y de clima templado-subhúmedo en territorio de Sinaloa.
El grupo de investigación liderado por Alejandro Torres Montufar, responsable del Herbario de la Facultad de Estudios Superiores (FES) Cuautitlán de la UNAM, descubrió la nueva especie de árbol.
De acuerdo con los expertos, la especie florece en septiembre y da fruto en octubre y noviembre.
El árbol alcanza una altura de dos a cuatro metros, con ramillas de estructura laminar resinosas y flores pequeñas que parecen campanitas, color lavanda similar a la jacaranda.
“Esta variedad se une a la categoría de las Rubiaceae, la cuarta familia más grande de las angiospermas dentro del reino de las plantas, las cuales se caracterizan por producir flores y frutos con aromas para atraer a los polinizadores como dispensadores”, indicó la UNAM en un comunicado.
El hallazgo de la nueva especie adquirió relevancia dado que forma parte de un microendemismo, es decir, su distribución es reducida y crece en una zona específica.
“Las condiciones particulares donde se desarrolla nos hacen pensar que no existe en otro lugar del mundo”, explicó el investigador Alejandro Torres Montufar.
Halla universitario nueva especie de árbol mexicano.
Es relevante porque corresponde a un microendemismo; las condiciones particulares donde se desarrolla nos hacen pensar que no existe en otro lugar del mundo, afirmó Alejandro Torres Montufar.https://t.co/2qeo4Zxeou
— Gaceta UNAM (@Gaceta_UNAM) October 17, 2024
Torres Montufar destacó que estos hallazgos resultan fundamentales para otras disciplinas científicas.
Por ejemplo, añadió, para la química, el análisis de organismos recién encontrados podría revelar compuestos únicos con potencial para desarrollar nuevos medicamentos, tratamientos farmacéuticos e innovaciones con aplicaciones en la medicina.
El grupo de investigadores observó por primera vez la especie Coutaportla lorenceana en 2018.
En ese año, la asociaron —con dudas— al género de las Chiococca P. Browne.
A finales del verano de 2019, visitaron nuevamente la localidad en la que encontraron esos arbolitos en floración.
“Esa condición y una exhaustiva revisión a diversos especímenes del herbario confirmó que se trataba de una especie de Coutaportla, que no había sido descrita por la ciencia”, señaló Torres Montufar.
En septiembre de 2019, recordó Torres Montufar afianzaron la exploración en una zona de aserraderos cerca del Espinazo del Diablo, en la que alcanzaron a distinguir un arbusto con flores lilas en lo profundo de la Sierra, a una distancia aproximada de cuatro o cinco kilómetros.
Añadió que la caminata hasta ese punto duró más de tres horas, en una extensión cubierta de pinos.
Después Torres Montufar pasó numerosas horas frente al microscopio, redactando descripciones y realizando tareas correlacionadas, para luego dar a conocer la novedad.
En el comunicado, indicó que el nombre de Coutaportla lorenceana se basó en el género y las características morfológicas identificables, pero el epíteto específico está dedicado a David Lorence, un botánico que ha contribuido al conocimiento de las Rubiaceae mexicanas.
Torres Montufar comentó que el descubrimiento de especies enriquece el saber sobre la biodiversidad del planeta, y brinda información de la evolución y adaptación de los organismos.
“Nuestra publicación es un llamado a cuidarla y a establecer áreas naturales protegidas; sabemos que falta mucho, pero es el primer paso”, indicó.