Agencias, Ciudad de México.- Nuevos resultados de una simulación de la Oficina del Censo de Estados Unidos sugieren que una cantidad considerable de población no ciudadana no fue considerada en el censo de 2020, un recuento nacional durante el cual el gobierno del entonces presidente Donald Trump intentó infructuosamente de impedir que se contara a quienes viven en el país sin autorización legal.
Un recuento simulado realizado por la agencia de estadísticas usó 31 tipos de registros administrativos de agencias gubernamentales y fuentes de terceros para producir estimaciones de la población estadounidense del 1 de abril de 2020, para compararlas con las respuestas tipo encuesta adoptadas en el más reciente recuento oficial de los habitantes del país.
La simulación fue un experimento que no cambia los resultados del conteo realizado cada década de todos los residentes de Estados Unidos, proceso que ayuda a determinar el poder político y la distribución a nivel nacional de 1.5 billones de dólares en fondos federales.
Casi una quinta parte de los no ciudadanos detectados en los registros administrativos tenían direcciones que no pudieron coincidir con las del censo de 2020, lo que sugiere que se pasó por alto “una fracción considerable de los no ciudadanos”, según el informe de la Oficina del Censo. En comparación, esa misma cifra fue del 5.4% para los ciudadanos.
Usando registros administrativos de agencias gubernamentales que tienen datos sobre inmigración, programas de asistencia social, registros de vehículos motorizados y otros, la prueba registró un 2.3% más de personas que en el censo real en 2020 que produjo un recuento de 331 millones de residentes de Estados Unidos, principalmente porque la simulación capturó a más no ciudadanos que residen en el país, según el informe.