Agencias/Ciudad de México.- El comisionado Rob Manfred compartió sentimientos encontrados sobre los derrochadores Dodgers de Los Ángeles, elogiando el espíritu competitivo de la franquicia en un momento y preocupándose por la disparidad financiera que han creado en el siguiente.

Los jugadores en otras partes de la liga no parecen tener problemas.

“Los equipos que gastan dinero nunca son malos para el béisbol y nunca son malos para los jugadores. Nunca. En ninguna situación”, dijo el toletero de los Atléticos Brent Rooker.

Si Manfred busca encontrar algo de simpatía en la familia del béisbol de las Grandes Ligas respecto a su preocupación por la salud financiera del deporte, probablemente no la obtendrá de los peloteros.

Las Grandes Ligas son el único deporte profesional importante en América que no tiene un tope salarial, aunque hay penalizaciones por impuestos de lujo por superar ciertos umbrales de gasto. La temporada pasada, los Dodgers tuvieron una nómina sujeta a impuestos de lujo de 353 millones de dólares y tuvieron que pagar 103 millones de dólares en impuestos. Los Atléticos tuvieron la nómina sujeta a impuestos de lujo más baja, con poco menos de 84 millones de dólares.

El gasto de Los Ángeles no se desaceleró esta temporada baja. Los Dodgers firmaron a Blake Snell, dos veces ganador del premio Cy Young, con un contrato de 182 millones de dólares por cinco años. También realizaron inversiones significativas en jugadores como Teoscar Hernández, Michael Conforto, Tanner Scott, Kirby Yates y Roki Sasaki.

Esto ocurrió un año después de que la organización gastara más de 1.000 millones de dólares en acuerdos con las estrellas japonesas Shohei Ohtani y Yoshinobu Yamamoto.

El gasto de Los Ángeles ha eclipsado al de casi todas las franquicias, excepto unas pocas. Los jugadores rivales pueden sentir envidia por esos sueldos elevados, pero es difícil encontrarlos que se quejen.

Incluso Manfred —quien dijo que ha recibido correos electrónicos de aficionados preocupados por el equilibrio competitivo— no puede criticar el enfoque de los Dodgers.

“Los Dodgers han hecho todo lo posible, siempre dentro de las reglas que actualmente existen, para poner el mejor equipo posible en el campo y eso es algo grandioso para el juego”, dijo Manfred. “Ese tipo de espíritu competitivo es lo que la gente quiere ver”.

Walker Buehler lanzó el último lanzamiento de la temporada 2024, registrando el último out para los Dodgers en su victoria en el quinto juego que les dio el campeonato de la Serie Mundial. Firmó un contrato de algo más de 21 millones de dólares por un año con los Medias Rojas de Boston durante el invierno, pero el derecho no está dispuesto a hablar mal de su antiguo empleador.

No sabe exactamente por qué los jugadores están acudiendo a Chavez Ravine.

“No creo que sea raro”, dijo el pitcher de 30 años. “Es una organización de primera clase y, obviamente, vienen de una gran Serie Mundial y, creo que además de eso, hay que añadir que en un equipo donde probablemente hay cuatro o cinco miembros del Salón de la Fama, creo que es un lugar atractivo para jugar”.

Eso no significa que no haya cierta admiración por parte de los jugadores sobre el formidable roster que los Dodgers han construido gracias a sus profundos bolsillos.

Esta temporada ha sido diferente a cualquier otra para los Dodgers bajo el liderazgo de Andrew Friedman. El presidente de operaciones de béisbol del equipo se fijó como meta reforzar su plantel durante la temporada baja, en lugar de apresurarse a adquirir talento en julio.

Friedman reforzó la rotación de abridores con la incorporación de Blake Snell, dos veces ganador del premio Cy Young, y el fenómeno japonés de 23 años Roki Sasaki. Estos dos se unirán a Shohei Ohtani, Tony Gonsolin y Dustin May, quienes regresan de lesiones.

Los Ángeles volvió a firmar al jardinero All-Star Teoscar Hernández, agregó al jardinero veterano Michael Conforto y fichó al utility coreano Hyeseong Kim. Luego está el bullpen. Blake Treinen regresó con un contrato de dos años, Tanner Scott firmó un contrato de cuatro años y una vez que haya un lugar disponible en el roster de 40 hombres, los Dodgers incorporarán oficialmente a Kirby Yates.

“Entrené con algunos chicos que terminaron firmando con los Dodgers y en un momento pensé: ‘No sabía que tenían espacio en el roster de 40 jugadores’”, dijo el lanzador de los Mediasa Rojas Patrick Sandoval.

Los Diamondbacks de Arizona son uno de los equipos que intentan mantener el ritmo con los Dodgers en la División Oeste de la Liga Nacional. Firmaron al as Corbin Burnes con un contrato de 210 millones de dólares por seis años en diciembre, pero aún se proyecta que tendrán una nómina que será aproximadamente la mitad del tamaño de la de los Dodgers.

“No creo que sea injusto en absoluto”, dijo el manager de los Dbacks Torey Lovullo. “Están dentro de las reglas, están haciendo lo que tienen que hacer para conseguir a los mejores jugadores en el campo. Cuando era niño, eran los Yankees, ¿recuerdas? George Steinbrenner estaba gastando locamente y eso dio como resultado campeonatos mundiales. Eso es lo que todos estamos persiguiendo”.

Lovullo hace un buen punto sobre los Yankees. El béisbol ha tenido una larga historia de disparidad financiera, particularmente desde que comenzó la agencia libre en la década de 1970.

Aun así, no ha habido muchas dinastías en los últimos 40 años. Los Dodgers están tratando de convertirse en el primer equipo en ganar títulos de la Serie Mundial consecutivos desde que los Yankees de Steinbrenner lograron un tricampeonato de 1998 a 2000.

El tercera base Max Muncy está en su octava temporada con los Dodgers y dice que una gran nómina ciertamente ayuda a construir un roster talentoso, pero no significa mucho una vez que comienza la temporada. Señala el 2023, cuando los Diamondbacks barrieron a los Dodgers en la postemporada en la serie divisional de la Liga Nacional a pesar de tener una nómina mucho más pequeña.

“Este deporte es realmente difícil”, dijo Muncy. “No importa qué tipo de roster tengas. Una y otra vez, los equipos han demostrado que entras a los playoffs y cualquier cosa puede pasar”.

Un jugador que ha sido campeón con los Dodgers en la Serie Mundial de la MLB en las temporadas 2020 y 2024, arremetió contra todos aquellos fans que se quejan del gasto excesivo de la gerencia de Los Ángeles en refuerzos.

El pitcher veterano Joe Kelly, quien se quedó sin contrato al final de la temporada 2024, defendió a la directiva de los Dodgers de Los Ángeles tras la lluvia de críticas que ha recibido después de los cientos de millones de dólares que han gastado en refuerzos y renovaciones.

“Digamos que Shohei Ohtani solo pudiera ganar $10 dólares. Incluso si cada equipo pudiera pagarle $10 dólares, él irá al equipo, en primer lugar, que es un gran destino. En segundo lugar, tienes que mostrarle lo que distingue (a tu equipo) en ese punto. ¿Por qué demonios diría: ‘Oh, voy a ganar $10 en Milwaukee?'”, declaró Kelly durante su participación en el podcast “Baseball Isn’t Boring”.

Los Dodgers han gastado más de mil millones de dólares en las últimas dos temporadas bajas, firmando a agentes libres de alto impacto. En redes sociales, muchos aficionados de la MLB han criticado duramente a la directiva de Los Ángeles por la enorme cantidad de dinero que han gastado en los fichajes de varias superestrellas.

Entre la temporada baja anterior y la actual, los Dodgers firmaron a Shohei Ohtani, Yoshinobu Yamamoto, Blake Snell, Tyler Glasnow, Teoscar Hernández, Tommy Edman, Michael Conforto, Roki Sasaki, Tanner Scott y el surcoreano Kim Hye-seong.

Los Dodgers, campeones de la Serie Mundial 2024, tienen la ambición de convertirse en el primer equipo en repetir el título desde los Yankees de Nueva York en el 2000. Con una nómina comprometida de aproximadamente $209.5 millones para la próxima temporada, están bien posicionados para lograr este objetivo.

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