Redacción InsurgentePress/Ciudad de México.- La Procuraduría General de Justicia capitalina dio a conocer que el autor intelectual del homicidio del cineasta León Serment, ha sido su hijo, que tres semanas después mató su madre, Adriana Rosique, intentando aparentar un suicidado.
De acuerdo con la PGJ-CDMX, el hijo del cineasta contrató a un hombre y una mujer para perpetrar el asesinato.
La pareja se instaló en las inmediaciones” del domicilio de Serment, que resultó muerto en un asalto en el que estuvo presente su hijo, el pasado 27 de agosto, dijo en conferencia de prensa el procurador capitalino, Rodolfo Ríos Garza.
En la noche del 27 de agosto, el cineasta perdió la vida a manos de unos delincuentes que le robaron a él y a su hijo en plena calle, luego de acompañar a la madre a abordar un taxi.
Según la versión del hijo, tras el asalto corrió a pedir ayuda pero cuando llegó la autoridad su padre ya había fallecido. El cuerpo presentaba 46 heridas y 12 se clasificaron de mortales.
No obstante, la fiscalía capitalina comprobó a través de vídeos y otras pruebas que había incongruencias en la declaración del hijo, algo que ratificó el testimonio de la madre.
A través de los vídeos obtenidos se demostró que los autores materiales del evento eran un hombre y una mujer” que ya se encontraban en las inmediaciones del domicilio, explicó hoy Ríos Garza.
Además, la madre mencionó que era “inusual que su hijo visitara al padre y que la novia” no dejara de mandar mensajes con el teléfono móvil en el momento de su estancia, antes del primer crimen.
Agregó que al salir del domicilio le extrañó la presencia dos personas a esa hora y que antes de abordar el taxi su hijo se despidiera efusivamente de ella”, detalló el fiscal.
Esa noche, los dos asesinos acudieron a dos sucursales bancarias y sacaron dinero usando el número secreto.
Hubo “un acuerdo previo, reparte de tareas y coordinación conjunta para privar de la vida a la víctima”, pues el hijo no prestó el debido auxilio y estuvo en comunicación con los asesinos, aseguró Ríos Garza.
El pasado 19 de septiembre, en el caso Adriana Rosique esposa del cineasta, hallada con una soga al cuello y suspendida de un barandal de su casa, el hijo incurrió en falsedades.
Todos los indicios apuntaban a un ahorcamiento o suicidio con una soga.
Ríos Garza aclaró que el caso de Rosique ha sido un homicidio, luego de que el hijo dejó abierta la puerta de la casa para que ingresarán los asesinos.
Estos habrían colocado una soga alrededor del cuello de la mujer y la habrían matado haciéndola “precipitar” desde un sitio elevado para que se ahorcara.
Según detalló el fiscal, los autores materiales e intelectuales “acordaron el pago de 100 mil pesos, por la vida de cada una de las víctimas”, y agregó que el hecho delictivo se planificó durante dos meses.
El hijo, cuyo nombre no se dio a conocer, narró que llevó a su novia al hospital y no se enteró del deceso de su madre hasta la mañana siguiente.
No obstante, no hay registro de que se presentara en ningún centro médico y pruebas videográficas muestran que salió de la vivienda y poco después los dos sicarios entraron por la puerta.
Además, en lugar de ir al centro médico, el hijo y su novia estuvieron “deambulando por las inmediaciones del hogar”, detalló.
Un examen facial confrontó las pruebas obtenidas en la investigación del padre y la madre y demostraron que los autores materiales eran los mismos.
Se emitieron y ejecutaron cuatro órdenes de arresto; dos para los asesinos y dos para autores intelectuales, ya recluidos todos en cárceles capitalinas.
“Los responsables son acusados de delito de homicidio calificado con una pena de hasta 70 años de prisión cada uno”, dijo el procurador.
En un interrogatorio a un inculpado, narró la “forma de comisión de cada uno de los homicidios”, y en el domicilio de la sicaria se encontró la tarjeta de Adriana Rosique, comentó Ríos Garza.