Agencias, Ciudad de México.- Barcelona está en camino para reducir sus deudas sin tener que recurrir a nuevas palancas financieras, dijo el miércoles el equipo al anunciar una ganancia neta superior a la esperada de 304 millones de euros (320.5 millones de dólares) por la temporada 2022-23.
El club dijo que sus ingresos operativos fueron de 1,260 millones de euros (1,330 millones de dólares), con gastos de 1,160 millones de euros (1,220 millones de dólares), lo que le permitió reducir la deuda neta por segunda temporada consecutiva. La deuda cayó de 680 millones de euros (717 millones de dólares) en junio de 2021 a 552 millones de euros (582 millones de dólares) en junio de este año.
“Hemos logrado sellar el boquete, pero debemos seguir trabajando en reducir la deuda a un monto considerable”, dijo Eduard Romeu, vicepresidente del departamento económico del club. “Estamos regresando a los ingresos corrientes ordinarios. Es decir, sin operaciones extraordinarias, sin palancas o ventas”.
Barcelona recurrió recientemente a una serie de operaciones financieras que le ayudaron a reducir la deuda, incluida la venta anticipada de derechos televisivos de La Liga española.
El club dijo que la mayor parte de su gasto provino de salarios deportivos, que ascendieron a 676 millones de euros (712 millones de dólares), o el 79% de los 860 millones de euros (906 millones de dólares) en ingresos sin tener en cuenta la venta de derechos de televisión.
Barcelona espera obtener beneficios en el actual ejercicio financiero a pesar de la reducción en sus ingresos resultante del traslado de partidos al estadio Olímpico en Montjuic, con menor capacidad, mientras que el Camp Nou se somete a un proceso de obras de remodelación. Dijo que la previsión es generar 859 millones de euros (905 millones de dólares) y una ganancia de 11 millones de euros (11.5 millones de dólares) antes de impuestos.
Funcionarios del tribunal dijeron el miércoles que el presidente del club, Joan Laporta, también será investigado por un juez que indaga sobre los pagos realizados por el Barcelona de millones de dólares durante varios años a una empresa que pertenecía al vicepresidente del comité de arbitraje de España.
El magistrado discrepa así del criterio de la Fiscalía Anticorrupción, que entiende que la responsabilidad de Laporta en los pagos, que se produjeron entre 2001 y 2018, había prescrito.
En este sentido, el presidente del Barça recordó que la fiscalía “califica los hechos de corrupción deportiva y administración desleal, pero en ningún caso cohecho” y reiteró su extrañeza porque un juez instructor, “que lo que tiene que hacer es investigar”, califique los hechos, “que es lo que corresponde a la parte acusadora”.
En cualquier caso, Joan Laporta insistió en que en el club reina la serenidad, “porque no lo han probado y no lo podrán probar, porque no es cierto” que los 7,3 millones que facturó Enríquez Negreira fueran por la compra de árbitros en lugar de por la elaboración de informes técnicos arbitrales y de seguimiento de jugadores.
Y atribuyó estas acusaciones a “una campaña orquestada para desestabilizar al Barça, aprovechando el ‘caso Negreira’ por parte de un madridismo sociológico que tiene mucha fuerza en los centros de poder de la capital”.
“Ya hemos competido con ese madridismo sociológico y además lo hemos ganado. Resulta que ahora está el mismo presidente que lo fue del mejor Barça de la historia, y ahora tienen miedo de que aquella etapa gloriosa que sufrieron mucho se vuelva a repetir, porque cada vez vamos mejor”, argumentó.
Para ilustrar su tesis, Laporta puso de ejemplo la elección del estadio que albergará la final del Mundial de 2030, que se celebrará en España, Portugal y Marruecos.
“Pedimos ser sede hace meses y seguro que el Spotify Camp Nou lo será de una semifinal. Pero aunque nuestro estadio es el que tendrá mayor aforo, 105,000 aficionados, es lo que hemos hablado antes del madridismo sociológico: los centros de poder de la capital son muy madridistas y seguramente la final se juegue en el Bernabéu”, sentenció.
La investigación está relacionada con el anterior paso de Laporta al frente del club catalán. También están siendo investigados los expresidentes Sandro Rosell y Josep Bartomeu.
