Por Erick Olivera Méndez/Ciudad de México.- El gobierno mexicano mantiene una estrategia silenciosa y efectiva contra el crimen y se han privilegiado los decomisos de droga frente a los grandes operativos de las Fuerzas Armadas. La investigación para localizar plantíos y centros de procesamiento de drogas sintéticas ha dado resultados y se han dado golpes en la distribución y la producción de enervantes. Sólo la Secretaría de la Defensa Nacional ha decomisado más de 500 toneladas de cocaína y mariguana y han destruido más de 850 laboratorios de fentanilo y metanfetaminas.
Las cuentas no son menores y de acuerdo con reportes oficiales del Ejército y la Fuerza Aérea, la cantidad de fentanilo destruido habría representado más de 28 mil millones de pesos en ganancias para el crimen organizado.
Como parte de los compromisos internacionales que mantiene el gobierno mexicano, la Secretaría de la Defensa da a conocer sus resultados en materia de combate al crimen, enfatizando la investigación sobre tráfico de estupefacientes.
La Sedena mantiene una estrategia hemisférica sobre drogas que empata con los lineamientos aprobados desde 1997 por la Asamblea General de la Organización de los Estados Americanos (OEA), y que adoptó en 2010 la Comisión Interamericana para el Control del Abuso de Drogas (Cicad). Entre los lineamientos de estos organismos se encuentra la generación de información para documentar la demanda y la oferta de drogas en la región.
Además, la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), estableció el 26 de junio como el “Día Internacional de la Lucha contra el Uso Indebido y el Tráfico Ilícito de Drogas”, una fecha en la que los países miembros destacan sus actividades en contra de la producción y distribución de enervantes.
En este contexto, la Secretaría de la Defensa Nacional destaca el papel que han jugado tanto el Ejército como la Fuerza Aérea en la lucha contra el crimen en función de la Estrategia Nacional de Seguridad Pública y la Política de Cero Impunidad del gobierno federal.
De acuerdo con información de la propia secretaría, entre el 1 de diciembre de 2018 y el 25 de junio de 2022, se han destruido 342,199 plantíos de amapola, con una superficie total de 46,034 hectáreas, además de 54,958 plantíos de mariguana con una extensión de 7,158 hectáreas.
Se suman a la destrucción de plantíos, el decomiso de 464,651 kilos de mariguana, 37,338 kilos de cocaína, 1,050 kilos de heroína, 90,321 kilos de metanfetamina y 3,365 kilos de fentanilo, así como la destrucción de 857 laboratorios para la producción de drogas sintéticas.
La estrategia ha sido silenciosa pero efectiva, y la destrucción de plantíos, así como la localización de laboratorios equipados para procesar metanfetaminas y fentanilo, una droga que preocupa por sus niveles de letalidad, han sido posibles por el uso de inteligencia militar.
Menos aparatosa que los grandes operativos, la otra estrategia de la Secretaría de la Defensa ha rendido frutos y mantiene activas las labores de investigación para combatir al crimen organizado en estricta coordinación con los tres órdenes de gobierno.
