Redacción InsurgentePress/Ciudad de México.- Miguel Santiago Reyes Hernández director general de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) Energía dijo que el subsidio de la paraestatal a empresas privadas nacionales y extranjeras de 471 mil 200 millones de pesos alcanzarían para llevar a cabo 10 rondas de vacunación contra la Covid-19 al total de la población del País.
“El monto total de todo esto, de todos los subsidios, equivale a 471 mil 200 millones de pesos. ¿Podríamos vacunar con esto a la población de Covid?
“Pues claro, si son 40 mil millones, podemos hacer 10 rondas de vacunación de Covid de toda la población mexicana. Por eso es tan importante el tema, porque esto se puede dedicar, destinar a la población, a la gente, a la gente más necesitada, a la de a pie, por eso es importante”, añadió ayer en conferencia de prensa en Palacio Nacional.
Reyes Hernández cuestionó que los jueces federales que ha otorgado amparos en 24 horas— fastrack— seguramente sin haber leído la Ley de la Industria Eléctrica y sus impactos han favorecido los contratos leoninos de las empresas nacionales y extranjeras en el País.
“No analizaron esto, no analizaron los subsidios, no analizaron que un competidor -porque así le dicen a la CFE: ‘Tú eres un competidor del mercado’- que un competidor del mercado, además el competidor vinculado al presupuesto público y a la hacienda pública y a recursos da la nación es el que está financiando a los demás.
“¿Esa es competencia leal, ese es piso parejo? Es una cosa para que, de verdad, los jueces que están haciendo o emitiendo los amparos pues se pronuncien por esto.
“¿Qué se ha implementado desde nuestro punto de vista entonces? Pues con esa iniciativa que se envió y que se aprobó por parte del Congreso es recuperar recursos de la hacienda pública; o sea, vamos a poner las condiciones parejas”, sostuvo.
Es necesario, dijo, poner en práctica la libre concurrencia y competencia sin subsidios en el País.
“Ya no puede ser un competidor que esté subsidiando a los demás. Esos subsidios, eliminarlos, pues implica recuperar recursos a la hacienda pública, implica que se va a fortalecer la Comisión Federal de Electricidad,
“Implica que vamos a garantizar a la población que no se van a incrementar las tarifas y que ese no incremento de tarifas, como lo dijimos hace rato.
“A diferencia de otras crisis donde con esos paquetes de ajuste que recomendaba pues el Fondo Monetario Internacional o quien fuera, aumentar tarifas de servicios públicos, bajar salarios, pues es ahora al revés, las tarifas no suben, los salarios mínimos se recuperan y los precios de los energéticos todos se mantienen constantes.
“¿Qué se requiere entonces para transitar hacia ello? Pues que las empresas, estas que han recibido estos subsidios, dejen solamente de ampararse y obviamente de financiar personeros para que nos estén golpeando todo el día”, afirmó Reyes Hernández.
Sin duda la CFE, dijo, podría coexistir en una competencia con empresas privadas nacionales y extranjeras con piso parejo sin subsidios.
“Hay un nuevo gobierno, hay una nueva realidad y en esa nueva realidad lo central ya no son estas grandes corporaciones, es el pueblo de México y primero obviamente el caso de los pobres”, señaló..
Actualmente, enfatizó Reyes Hernández, la CFE ha pasado en subsidios de transmisión a grandes empresas 49 mil 609 millones de pesos en el último trienio.
De este monto, dijo, la empresa Iberdrola— de España— concentra el 26 por ciento de estos subsidios que ascendió a 12 mil 675 millones de pesos.
La reforma energética de 2013, recordó Reyes Hernández, trajo consigo beneficios a una minoría de la cúpula empresarial nacional y extranjera en perjuicio de la mayoría de mexicanos.
La Ley de la Industria Eléctrica aprobada por el Poder Legislativo en 2021, busca revertir los aspectos más negativos para los mexicanos de la privatización del sistema eléctrico, eliminando los subsidios a las grandes corporaciones y garantizando a la población que no aumente la tarifa de electricidad.
“Fíjense, la (energía) hidráulica es la más barata, la hidroeléctrica, que se ha mantenido olvidada, querían los gobiernos neoliberales que la destruyéramos, que la dejáramos ahí, 60 años, 50 años sin inversión en las nuevas turbinas; la nuclear, barata”, indicó.
Este es un caso emblemático de la energía limpia y barata, ironizó Reyes Sánchez, resulta que existe contrato de producción independiente con la empresa española Iberdrola en la región de La Venta región cuyos pobladores sufrieron literalmente un robo en la compra-venta de sus tierras.
“Esta central, que se llama La Venta III, vende energía a CFE a un precio de 2.73 pesos por kilowatt/hora, fíjense, ya de entrada 2.73. ¿Cuánto pagaba el hogar que dijimos ahorita? A 2.30. Ya de entrada me la está vendiendo a 2.73. ¿Será que puedo venderla?, o sea, ¿la voy a poder vender 2.30?
“Pues seguramente sí, pero con un subsidio. ¿A quién estaríamos subsidiando realmente ahí? A los señores (de Iberdrola. ¿Es barata entonces la energía eólica?.
“La CFE lleva esta energía desde la central eólica a toda la región oaxaqueña por un costo de 1.28, es decir, el costo de la transmisión, de la distribución, de otros servicios adicionales que se requieren para que la energía llegue a los hogares.
¿Cuánto es el costo total entonces por llegar a un hogar de Oaxaca? Porque además esa energía que la Comisión Federal de Electricidad está obligada, porque es un contrato con Iberdrola a 25 años, entonces tenemos que hacerlo.
“¿Cuánto nos costaría? Cuatro pesos. ¿A cuánto lo podemos vender? A 2.33.
“Te dicen: ‘Ah, es que la CFE es ineficiente, tiene subsidios altísimos, por eso es que va a quebrar, porque es ineficiente’. ¿Es ineficiente, o de entrada tienes un contrato abusivo, leonino, en donde ya estás poniendo desde el inicio condiciones para el subsidio?
Entonces, este es el costo y esto a lo que tendría que vender, 40 centavos de subsidio por kilowatt/hora para la empresa Iberdrola. ¿De dónde salen los subsidios? Pues de la hacienda pública, de los impuestos.
“La otra salida que hicieron los neoliberales es aumentar las tarifas, porque prometieron con su reforma energética de 2013 que iban a bajar, pero díganme quién de ustedes vio que bajaran las tarifas entre 2013 y 2018. Subieron en 35 por ciento”, afirmó.
Las tarifas han subido en ese periodo, explicó, producto de mantener los subsidios de los contratos leoninos a costa de sangrar.
“Por eso la gran hazaña de este gobierno del Presidente López Obrador de decir: Primero vamos a parar ese incremento tarifario y pasarle este costo a las familias, porque no es justo y, segundo, pues vamos a poner orden y vamos a desaparecer estos subsidios. De eso se trata la nueva ley. De eso se tratarían las nuevas reglas”, afirmó.