Agencias / Ciudad de México.- En medio de una complicada situación financiera y de negociación de adeudos, Interjet informó esta tarde que el ex banquero Carlos Cabal Peniche retiró su participación en la aerolínea.
En julio pasado, Cabal Peniche anunció que como parte de un nuevo grupo de inversionistas, junto con Alejandro del Valle, pretendían inyectar 150 millones de dólares, situación que “no afectará” los proyectos de capitalización para hacer frente a la reestructuración de la aerolínea.
“Alejandro del Valle, Miguel Alemán Magnani y Miguel Alemán Velasco continuarán como socios en la aerolínea, salvaguardando los intereses de la empresa y sus empleados, haciendo frente a sus compromisos con las autoridades y sus acreedores, y mejorando la calidad de su servicio en favor de los pasajeros”, detalló el equipo de comunicación de la empresa mexicana.
Sin embargo, no se precisó el monto de la inversión que había prometido Cabal Peniche, quien a través de un comunicado de Grupo Cabal también dio a conocer horas antes que retiraba “su participación en la empresa HBC, inversionista de Interjet”.
La empresa HBC International, presidida por Alejandro del Valle, fue creada en el 2014, en Naucalpan, Estado de México, y entre las acciones a las que se dedica o puede hacerlo están: participar en toda clase de actividades comerciales o industriales tanto del sector público como privado, nacional e internacional y prestar por cuenta propia o de terceros todo tipo de servicios de asesoría y consultoría para el desarrollo de programas de sectores estratégicos gubernamentales, privados, asociaciones y sociedades mercantiles.
La administradora única es Samantha Elizabeth del Valle Guerrero, que tiene el 50% de las acciones, el 40% está en poder de Carlos del Valle Guerrero, quien es director general ejecutivo de Interjet, y el 10% restante en Samantha Elizabeth del Valle Guerrero.
Alejandro del Valle, presidente ejecutivo de Interjet ha informado que adquirió el 90% de las acciones de Ia aerolínea, aunque no han podido levantar el vuelo por los adeudos previos al SAT, trabajadores y Aeropuertos y Servicios Auxiliares, entre otros.
La situación por la que pasa la aerolínea Interjet no se debe a la crisis provocada por el Covid-19, sino por los adeudos fiscales que tiene desde 2013, indicó Raquel Buenrostro, jefa del Servicio de Administración Tributaria (SAT).
“Sus adeudos son del 2013. Prácticamente son por retenciones de IVA e ISR. Desafortunadamente, la situación que hoy vive la aerolínea no tiene nada que ver con el Covid-19, porque son adeudos desde el 2013”, declaró a medios en conferencia de prensa.
La funcionaria del SAT señaló que estos adeudos se generaron por omisiones que empezaron hace siete años y continuaron hasta parte de 2018, en donde tuvieron que ver funcionarios del fisco, directivos de la empresa y despachos contables que permitieron dichas omisiones.
Por ello, agregó, ha estado en contacto con la empresa para mejorar la situación y salvaguardar los empleos de quienes laboran en la aerolínea.
“Se han tenido muchas pláticas con Interjet desde el 2019. Entre broma y en serio digo que recibo más a Interjet que a mis administradores generales. Desafortunadamente no se han concretado ninguna de las propuestas de solución y nuestro interés, en principio, es salvaguardar el trabajo del personal de Interjet antes que, incluso, cobrar los impuestos”, aseveró.
En este sentido, explicó que en los últimos días se ha hablado sobre una “intervención de caja” a la aerolínea. Esto, explicó, significa la llegada de un interventor ajeno al gobierno para supervisar los ingresos y gastos de una empresa.
Por ley, con una intervención de caja los ingresos que obtenga una empresa tienen que destinarse a la nómina de los trabajadores y, después, para el pago de impuestos.
“La intervención de caja y el embargo precautorio no limita el uso de los bienes y activos. El embargo es en un papel porque muchas empresas, cuando están a punto de la quiebra, venden, el dinero es entregado a los dueños, la empresa se queda sin dinero y no hay recursos para liquidar a los trabajadores. El embargo es para evitar eso”.
En caso de que se venda, agregó, el dinero debe entrar primero a la empresa para garantizar la liquidación del personal. “Ese es el embargo precautorio, es un procedimiento legal pero que está en papel y no impide la operación de la empresa”.
Señaló que en la aerolínea había directivos con un sueldo mensual de 5 millones de pesos.
“El SAT no está inmovilizando ni los bienes ni tampoco está interviniendo la caja”, dijo.
La jefa del SAT agregó que el problema de Interjet es estructural, por lo que necesita urgentemente un aumento de capital. “Por eso hemos sido pacientes y prudentes porque somos empáticos con los trabajadores. Queremos aguantar hasta que se materialice ese aumento de capital”.