Agencias/Ciudad de México.- Estados Unidos registró más de 3.000 decesos por COVID-19 en un solo día, rompiendo todos los récords ayer desde que comenzó la pandemia y enfrentándose así a la posibilidad de seguir teniendo el equivalente a los muertos por los ataques del 11 de septiembre (11S) de 2001 diariamente.
La base de datos de la Universidad Johns Hopkins determinó que el miércoles en 24 horas fallecieron 3.157 personas por el coronavirus, lo que supera en unos 1.000 muertos más a los niveles de mortalidad alcanzadas en la primera oleada en mayo.
Nada hace indicar que estas cifras de mortalidad vayan a reducirse en los próximos días, por lo que el país más rico del mundo se enfrenta a la desoladora posibilidad de registrar el equivalente a varios ataques del 11S, que dejaron 2.977 muertos, diarios.
Por si fuera poco, las hospitalizaciones siguen al alza, con más de 100.000 camas ocupadas por la pandemia hasta el miércoles y casi 20.000 pacientes en unidades de cuidados intensivos en todo el país.
El país se acercó este jueves a las 200.000 infecciones diarias, después de añadir más de un millón de infecciones semanales en noviembre, con lo que Estados Unidos lleva acumulados cerca de 14 millones de casos de la covid-19 desde que comenzó la pandemia, más que ninguna otra nación del planeta.
El director de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC, en inglés) de Estados Unidos, Robert Redfield, auguró este miércoles que el sistema sanitario está ante los meses más difíciles de su historia por el fuerte repunte de la pandemia.
A este ritmo, Estados Unidos no tardará en alcanzar los 300.000 muertos con una pandemia claramente desbocada y fuera de control en el período más delicado del año: las vacaciones navideñas.
“La realidad es que diciembre, enero y febrero van a ser tiempos difíciles. De hecho, creo que van a ser los más difíciles en la historia de la salud pública de esta nación, en gran parte debido al estrés que se va a poner en nuestro sistema de atención médica”, sostuvo Redfield durante una conferencia.
Redfield, además, vaticinó que al llegar a febrero habrán muerto 450.000 personas en el país, lo que significa unos nuevos 180.000 fallecidos solo entre diciembre y enero.