Agencias / InsurgentePress, Ciudad de México.- Tom Brady, quien fue nombrado el jugador más valioso (JMV) del Supertazón por cuarta ocasión, recibió este lunes el trofeo de manos del comisionado de la NFL, Roger Goodell, y confirmó que todavía no encuentra la playera con la que ganó el partido del domingo, cuando Nueva Inglaterra superó 34-28 a Atlanta, en una remontada para la historia en la conquista de su quinto anillo con la franquicia.
En conferencia de prensa, Brady, el mejor mariscal de todos los tiempos por cinco títulos (2002, 2004, 2005, 2014 y 2017), dejó entrever la posibilidad de que alguien robara la camiseta al solicitar a los periodistas que lo ayudaran a encontrarla.
La puse en mi bolsa, salí y ya no estaba allí. Es lamentable, porque es una buena pieza de recuerdo, si termina en eBay, háganmelo saber, agregó.
Son bastante especiales para guardar (esas camisetas)… ¿Qué puedes hacer? Tomaré el anillo y eso es suficientemente bueno para mí, dijo.
El vicegobernador de Texas, Dan Patrick, pidió a las máximas agencias policiales del estado que ayuden a localizar la prenda.
En un comunicado, el político republicano informó que la camiseta de Brady fue robada poco después del Supertazón que se llevó a cabo en el estadio NRG de Houston, la cual estaría valuada en medio millón de dólares.
El JMV del Supertazón 51 consideró que este reconocimiento tendría que haber sido para el corredor James White.
Creo que James lo merece. Hubiera sido maravilloso para él. Hace todo bien y no te puedes molestar con él. Es el mejor compañero. Es un increíble jugador. Estoy orgulloso de él y de todo lo que ha logrado.
White alcanzó el récord de mayor número de recepciones en un Supertazón con 14, además de 110 yardas, una anotación aérea y dos por tierra.
El corredor de 25 años suplió durante el partido a Dion Lewis, quien abandonó el juego por una lesión en la rodilla.
El futuro miembro del Salón de la Fama agregó que no contempla el retiro, ya que asegura sentirse rejuvenecido por su particular régimen de entrenamiento. Uno de los atletas más ricos del mundo percibió en 2016 salario y patrocinios por 44 millones 100 mil dólares, y con su quinto anillo, sin duda, ganará más.
